El mundo de la respostería es infinito. Desde chocolate, vainilla, buñuelos hasta pasteles, es conocida por endulzar nuestras comidas. ¿Quién no disfruta de un buen postre o de un buen desayuno? Como todo, la respostería también tiene unas bases que no podemos obviar. Una de ellas son los tipos de masa que debemos conocer ya que de ellas parten la mayoría de recetas. En el post de hoy te contamos los diferentes tipos que puedes elaborar, además, con nuestro Curso Experto en Pastelería y Respostería, te formarás de la forma más cómoda posible.
Índice de contenidos
Principales tipos de masa
Podemos encontrar diferentes tipos de masa dependiendo de su elaboración. Con cada una de ellas se puede hacer infinidades de recetas diferentes, pero para ello, debemos conocer sus características principales.
Masas de hojaldre
La principal característica de este tipo de masa es su textura crujiente. Elaborada con harina, mantequilla, agua y sal. Una de las particularidades del hojaldre son las veces que se dobla la masa para crear el resultado final. Depende de cuántas vueltas le demos a la masa se hacen unas recetas u otras. Con la masa de hojaldre podemos elaborar milhojas, palmeras, vol au vents, cañas, palmeras, cornetes.
Masas azucaradas
Existen diferentes tipos de masa azucarada, dependiendo de su textura. Como su nombre indica, las masas azucaradas tienen un alto porcentaje de azúcar en su elaboración.
Podemos encontrar masas azucaradas más compactas, ya que tiene una textura mucho más seca y arenosa. Las masas más cremosas tienden a ser esponjosas y las utilizamos para hacer recetas de bizcochos más densos. Y finalmente encontramos la masa azucarada semiblanda ya que le podemos añadir frutos secos en su elaboración.
Con estos tipos de masa podemos hacer recetas como lenguas de gato, tulipas, pastas rizadas de manga, pastas lisas de manga, pastas de corte, pasta brisa salada…
Masas escaldadas
Se llaman masas escaldadas ya que un paso de su elaboración es cocinarlas con agua hirviendo. Sus ingredientes son sencillos: harina, mantequilla, huevo y sal. Después de elaborar la masa, podremos hornearla o freírla, dependiendo de la receta que queramos hacer. Las principales recetas que podemos hacer con este tipo de masa son los petisús, buñuelos o churros.
Masas batidas
De los tipos de masa que encontramos, las batidas se les introduce aire cuando las elaboramos. Son conocidas por ser muy esponjosas gracias a la levadura y, durante su cocción, aumentan mucho de volumen. Como las masas azucaradas, también encontramos diferentes tipos de masas batidas dependiendo de su textura.
Las masas batidas ligeras son aquellas que no incorporamos grasas al cocinarlas. En cambio, las masas batidas pesadas son las que sí incluyen un gran porcentaje de grasas, como mantequilla o margarina. Podemos elaborar magdalenas, sobaos, mantecadas, bizcochos de molde, bizcochos de plancha, compacto…
Masas fermentadas
Son aquellas que, como su nombre indica, necesitan un tiempo de fermentación para que se cocinen perfecto. Se utiliza levadura fresca para que la masa pueda aumentar de tamaño. Las preparaciones más comunes que se emplean estos tipos de masa son panes, brioches, berlinas…