Seguro que paseando por la ciudad te has encontrado algún restaurante especializado en ramen. Seguramente paseando también por un supermercado te lo has encontrado precocinado o instantáneo. Y es que está en todas partes y se lanza a conquistar el mundo gastronómico. Te explicamos su origen y sus principales ingredientes para que conozcas un poco más el amplio mundo del ramen. ¿Te gusta la restauración? Pide más información sobre nuestro curso de cocina nacional, internacional y cocina creativa.
Índice de contenidos
El origen del ramen
Hay mucho debate sobre de dónde es original esta sopa. Es considerado una invención japonesa, aunque su origen es chino. En 1900 los restaurantes chinos empezaron a servir una sopa de fideos con pocos ingredientes y un caldo hecho con sal y carne. No fue hasta después de la II Guerra Mundial cuando el ramen empieza a ganar protagonismo en Japón. A finales de los años 50 se cuela en el mercado la primera sopa instantánea de fideos, que se convierte en poco tiempo en muy popular.
A día de hoy, el ramen forma parte de la gastronomía japonesa y se considera un producto netamente japonés y básico en la dieta del país. ¿Pero, en que consiste realmente esta sopa
Ingredientes principales del ramen
Ahora entraremos en materia, pero antes te dejamos un resumen rápido de lo qué es el ramen. Este se puede considerar una sopa de fideos con una base de caldo de carne, servida con una gran variedad de ingredientes de acompañamiento.
Los fideos
Los fideos se elaboran con harina de trigo, agua, sal y kansui. El kansui es un tipo de agua que contiene altas concentraciones de carbonato de potasio, de sodio y una ligera cantidad de ácido fosfórico. Los fideos del ramen obtienen su particular elasticidad y color gracias a la composición química del kansui. Se puede utilizar huevo en lugar de esta agua para simular sus efectos.
El caldo
Como hemos mencionado, el caldo es una de las partes principales del ramen. Cada región de Japón tiene una manera única y diferente de prepararlo, pero hoy os vamos a hablar de cuatro tipos de ramen según su caldo.
El Shoyu ramen
Shoyu es la abreviatura japonesa de salsa de soja, por ello esta sopa se basa en un caldo que utiliza la salsa de soja como elemento base de su sabor. Esta salsa es una mezcla fermentada de trigo y soja. El caldo también obtiene algunos sabores gracias a añadirte ingredientes como el sake, el pollo, marisco, mirin, carne de ternera o cerdo…
Ramen Shio
Se trata de uno de los caldos más tradicionales y que más se parece al original chino. Se prepara con un simpe caldo de pollo muy claro y una base de sal. Es el más simple de elaborar. Tiene un sabor suave y es muy popular en la región de Hokkaido, una de las islas principales de Japón.
Ramen Miso
El miso es un condimento con consistencia de pasta hecho con semillas de soja, cereales y sal marina fermentada con el hongo koji. El ramen de miso se elabora a base de caldo de pollo mezclado con alguna variedad de esta pasta japonesa.
El Ramen Tonkotsu
El caldo más popular y posiblemente el más complicado de preparar consiste en un caldo espeso elaborado con huesos de cerdo hervidos muy lenta y meticulosamente. Tiene una consistencia espesa, casi gelatinosa, pero deliciosa. Este tipo de ramen se puede combinar con un toque de miso o shoyu (soja).
El topping
Las posibilidades son infinitas, así como los ingredientes que le quieras añadir a tu ramen. El paso de los toppings es a elección del consumidor. Normalmente los ingredientes más populares pueden ser: huevos hervidos, naruto (esa florecilla tan característica del ramen, hecha de pasta de pescado al vapor) rebanadas de cerdo, cebollines, verduras hervidas… Te enseñamos a preparar algunos de estos ingredientes de acompañamiento.
La carne
El chashu, la guarnición por excelencia del ramen tiene sus orígenes en China. Se trata de una carne de cerdo marinada que se te deshace en la boca. Si queremos hacer ramen en casa, os recomendamos que sustituyáis el chashu por lomo de cero o pechuga, ya que su elaboración es muy complicada e iréis mucho más rápido utilizando este tipo de carne y se le parece mucho. Tenéis que cocinar el trozo de carne a la plancha a fuego medio, para que quede lo más tierno posible.
El huevo
Atento porqué te explicamos como cocer el huevo perfecto estilo japonés. Es muy sencillo, aunque se te puede complicar si te saltas alguno de los pasos. El huevo del ramen se caracteriza por tener una yema muy suave, firme pero cremosa. El secreto está en el marinado con la salsa de soja, que también le proporciona un sabor salado.
Para que la yema te quede perfecta cuece el huevo en agua hirviendo solo 7 minutos. Pasado este tiempo, echa los huevos en un recipiente con hielo, para así cortar de seco la cocción, y déjalos durante 10 minutos.
Preparamos el marinado. En un recipiente vertimos agua, salsa de soja y mirin -si tenemos-. Cuando hayan pasado los 10 minutos de los huevos con el hielo, los pelamos y los introducimos en el recipiente que hemos preparado. Lo cerramos bien y lo introducimos a la nevera durante mínimo 12 horas. ¡Puedes hacerlo la noche anterior para que en la hora del almuerzo tengas los huevos listos!
Como curiosidad, existe un museo dedicado especialmente al ramen en Yokohama, Japón, donde podemos ver expuestos los diferentes utensilios que se han utilizado al largo de la historia para elaborar estos fideos. Se trata de una comida muy sabrosa, rápida y sana que ha conquistado el corazón y el estómago del público. ¡El ramen ha llegado para quedarse, es por ello que debemos disfrutarlo y probar la mayor variedad que podamos, ya que las posibilidades son infinitas!