El diseño de las cartas para restaurantes es imprescindible para que el negocio funcione. A parte de ser la materia prima con la que se trabaja, la carta es la imagen del negocio. Es su DNI, su tarjeta de identificación. Es por ello que se necesita invertir el tiempo necesario para su propuesta. ¡Si quieres aprender algunos trucos quédate en el post! Si quieres formarte y adquirir más conocimientos sobre el tema no dudes en consultar nuestro máster en diseño y comercialización de ofertas de restauración.
Índice de contenidos
Antes de crear la carta
Antes de ponerte manos a la obra hay una serie de cosas esenciales a tener en cuenta. Las cartas para restaurantes no se pueden idear sin antes tener claro la filosofía del negocio, su público objetivo y las necesidades de este.
Tipo de restaurante
Tienes que tener claro el tipo de restaurante del cual vas a idear el menú. El estilo de este puede variar según el tipo de negocio y la imagen que este quiera dar. Si quieres presumir de ofrecer platos saludables tienes que mostrarlo. Por otro lado, si quieres ofrecer un menú de platos exóticos, el diseño de la carta tiene que ser acorde con lo que ofreces.
Público objetivo
Conocer el perfil de tus clientes es muy importante para diseñar la carta. Aunque aún no hayas abierto al público, puedes tener una idea de qué tipo de cliente vendrá a comer. Si ofreces un servicio profesional, donde tus clientes puedan pasarse más de dos horas, puedes servir platos más elaborados. En cambio, si tu público tiene poco tiempo, ofrece un menú donde no necesites mucho tiempo para comer, como bocadillos o pizzas.
¿Cómo aplicar la ingeniería a las cartas para restaurantes?
Aunque parezca extraño, se utiliza la nombrada ingeniería de menús para sacarle el mayor rendimiento al negocio. Primero de todo es importante que sepáis que este truco solo se puede emplear en restaurantes que ya tengan un poco de recorrido, ya que se utiliza un análisis de resultados.
¿Pero, qué es la ingeniería de menús? Básicamente es saber qué platos son los más populares y más rentables de la carta para colocarlos de forma estratégica y facilitar que los clientes los escojan.
Para llevarlo a cabo se tienen que hacer dos tipos de análisis, el de popularidad y el de rendimiento.
Análisis de rendimiento
Este análisis puede ser un poco tedioso, pero le recomendamos que lo lleve a cabo. Se trata de saber cuál es el margen contributivo de cada plato. Para ello, tenemos que tener en cuenta el precio de venta y el coste que tiene para el restaurante realizar ese plato. El margen contributivo es el resultado de la resta del precio de venta y el coste de producción. Así sabemos el beneficio económico que nos da cada plato. Por eso, es más importante aumentar el margen contributivo que comprar productos más baratos para reducir costes.
Análisis de popularidad
¡La rentabilidad, que ya hemos visto, más la popularidad, es la fórmula mágica para tener un mayor beneficio! Para el análisis de popularidad debemos saber el número de veces que se pide un plato en un período de tiempo determinado. Así, sabremos qué platos gustan más a los clientes.
Después de conocer los resultados podemos empezar a diseñar las cartas. Los platos con mayor rentabilidad y popularidad deben estar resaltados y ser los protagonistas del menú. Por otra parte, los platos que son muy populares, pero no son rentables, se tendría que mirar de mejorar el margen contributivo, sin que se note mucho en el resultado del plato. O si un plato es muy rentable pero no es muy popular, puedes utilizar diversas estrategias para hacerles más promoción.
Consejos para el diseño de la carta
Llega la hora de la verdad y es cuando tenemos que dar rienda suelta a nuestra creatividad. Ahora te daremos algunos consejos que te recomendamos seguir para tu diseño.
Formato
Hay diferentes cartas para restaurantes dependiendo de su formato. Podemos encontrar cartas en formato tríptico, muy funcionales para aquellas cartas con muchas ofertas. Hay restaurantes que optan por una carta en formato libro, con tapa dura, por ejemplo. Si tienes un bar, puedes optar por el formato folleto, muy visual y más informal.
Tipografía
La tipografía es muy importante. Debemos escoger una fuente que sea leíble, entendedora. Un consejo, evita la cursiva, ya que es más tosco de leer para el cliente. Puedes combinar colores oscuros encima de colores claros, como el blanco. Intenta no utilices colores como el amarillo porqué también son difíciles de leer.
Imágenes
Si te planteas la opción de poner fotografías de los platos te recomendamos que lo pienses detenidamente. Las imágenes pueden distraer al cliente y estar mucho más tiempo para escoger su menú. Sobretodo, si eliges la opción de insertar fotografías de los platos escoge aquellas con mejor calidad.
Un consejo: si tu restaurante está situado en una zona muy turística y la mayoría de tus clientes no entienden el idioma, te recomendamos que, a parte de traducir tus platos al inglés, pongas fotografías.
Alérgenos
Te recomendamos que pongas la información sobre los alérgenos que puedan contener tus platos. Ahora mismo hay mucho volumen de gente que padece algún tipo de alergia o intolerancia. Con este truco puedes conseguir también clientes nuevos.
Menú infantil
Otro consejo es que incluyas un menú infantil en tu oferta. Por ejemplo, ofrecer un plato combinado de macarrones con pollo rebozado y patatas. Es un plato sencillo que los más pequeños les encanta. Son muchas las familias que van a comer y no encuentran platos para los niños. Es un plus para tu restaurante si tienes una oferta especialmente para ellos.
Ya sabes algunos trucos a la hora de diseñar cartas para restaurantes, ahora solo falta ponerse manos a la obra. ¡Mucha suerte!